La estabilización de taludes es una metodología de trabajo que impide movimientos no deseados en el terreno que puedan poner en peligro tanto vidas como infraestructuras y viviendas.
La utilización de anclajes pasivos, también llamados bulones o pernos se ha desarrollado en los últimos años, desde el uso como anclaje pasivo aislado hasta conseguir su uso conjunto en toda la superficie de talud, en combinación con sistemas flexibles de redes y mallas, a modo de membranas tensadas desde su perímetro, de forma que podemos considerarlas como cabezas de reparto de todos los bulones contenidos en ellas